Cómo obtener la Ciudadanía por Inversión en el Caribe mediante bienes raíces

Solo cinco países caribeños ofrecen Ciudadanía por Inversión: Antigua y Barbuda, Granada, Dominica, San Cristóbal y Nieves, y Santa Lucía. Convertirse en ciudadano caribeño significa obtener un pasaporte de uno de estos países mediante una contribución a la economía. La suma invertida mínima es de $200.000.

Los programas de Ciudadanía por Inversión del Caribe están autorizados por el gobierno y son seguros, y gozan de una excelente reputación global. Los programas de inversión de Dominica, San Cristóbal y Nieves, y Santa Lucía están clasificados como los mejores en la edición global del Índice de Ciudadanía por Inversión.

1. Movilidad internacional. Los ciudadanos caribeños pueden visitar más de 140 países sin visado. Esto incluye el espacio Schengen, el Reino Unido, Hong Kong y Singapur. Los ciudadanos de Granada, Antigua y Barbuda y Dominica también pueden entrar en China sin visado.

2. Visados de larga duración para EE. UU. Los ciudadanos caribeños pueden obtener un visado de visitante B-1/B-2 en un plazo de 2 a 3 semanas; este visado se concede por 10 años. Los ciudadanos de Granada pueden obtener un visado de inversor E-2 y abrir una empresa en Estados Unidos.

3. Acceso a la banca internacional. Los ciudadanos caribeños pueden abrir cuentas en bancos europeos y de la Commonwealth con mayor facilidad. A los extranjeros normalmente se les exige más documentación para abrir una cuenta bancaria, y solo algunos bancos caribeños aceptan trabajar con no residentes.

4. Optimización fiscal. Los ciudadanos caribeños no pagan impuestos sobre sucesiones ni sobre plusvalías.

La fiscalidad varía según el Estado, pero en general los sistemas son favorables. Algunos ejemplos: San Cristóbal y Nieves, y Antigua y Barbuda no aplican impuestos sobre la renta. En Granada, San Cristóbal y Nieves y Antigua y Barbuda, los particulares no pagan impuestos por la transmisión de bienes inmuebles.

5. Oportunidades educativas internacionales. Todos los Estados caribeños con programas de ciudadanía son miembros de la Commonwealth británica. Los estudiantes caribeños pueden obtener becas y otros beneficios para estudiar en países de la Commonwealth, incluido el Reino Unido.

6. Conservación del primer pasaporte. En los Estados caribeños con programas de inversión se permite la doble ciudadanía. Esto significa que los ciudadanos caribeños que tengan la ciudadanía de otro país, o de varios, no están obligados a renunciar a ella.

7. «Plan B». Los ciudadanos pueden trasladarse al Caribe en cualquier momento, incluso si las fronteras están cerradas.

Todos los países caribeños que ofrecen ciudadanía por inversión son Estados insulares. Están rodeados por el mar Caribe y representan el ideal de un paraíso tropical.

Al solicitar la ciudadanía caribeña, no existen diferencias en las condiciones para los ciudadanos de la Unión Europea y los que no lo son.

El inversor se considera el solicitante principal. Los requisitos para ellos incluyen lo siguiente:

• edad superior a 18 años;

• ausencia de antecedentes penales;

• ingreso legal;

• fondos para el cumplimiento de la condición de inversión;

• buena salud.

Miembros de la familia. El inversor puede incluir a su familia en la solicitud: su cónyuge, padres e hijos menores de 18 años, así como hijos con discapacidad de cualquier edad.

Los diferentes estados caribeños tienen reglas distintas al respecto. Por ejemplo, en Antigua y Barbuda, los hijos adultos sin discapacidad no deben tener más de 30 años. Los padres del inversor deben tener al menos 65 años en Dominica y 55 en Antigua y Barbuda o San Cristóbal y Nieves.

Los hermanos del inversor no pueden ser incluidos en Dominica, y los abuelos del inversor no pueden ser incluidos en San Cristóbal y Nieves.

Todos los miembros de la familia, excepto el cónyuge, los hijos menores de 18 años o los hijos con discapacidad de cualquier edad, deben ser dependientes económicamente del inversor.

Existen entre dos y cinco opciones de inversión en todos los Programas de Ciudadanía por Inversión del Caribe. La opción inmobiliaria está presente en todos ellos.

Los inmuebles disponibles incluyen proyectos autorizados por el gobierno; dependiendo del país, pueden ser villas, alojamientos turísticos, hoteles, complejos turísticos e incluso puertos deportivos.

Los inversores compran participaciones u obtienen la plena propiedad.

Asequibilidad. El requisito de inversión mínima para los inmuebles en el Caribe comienza en 200.000 $. Los inversores que deseen convertirse en ciudadanos caribeños están exentos de gastos adicionales: por ejemplo, no tienen que adquirir una Licencia de Tenencia de Tierras para Extranjeros.

En la inversión inmobiliaria en el Caribe, la cantidad mínima no depende del número de solicitantes. Sin embargo, la tasa estatal será diferente para los solicitantes individuales y quienes solicitan con sus familias.

Rentabilidad. Los inversores pueden obtener ganancias de la propiedad adquirida. Los inmuebles de inversión residenciales y comerciales en el Caribe pueden alquilarse y explotarse con fines de lucro. La rentabilidad anual suele ser del 3 al 5 %.

Comodidad. Las empresas de gestión se encargan de la mayoría de las propiedades de inversión. Así, los inversores no tienen que buscar inquilinos ni ocuparse de los inmuebles mientras obtienen ingresos pasivos.

Liquidez. Los inversores pueden revender su propiedad en 3 a 7 años y recuperar la inversión.

Algunos estados caribeños imponen restricciones sobre los tipos de propiedades para los inversores. Por ejemplo, en Antigua y Barbuda, una propiedad solo puede participar en un programa de ciudadanía dos veces, y Dominica no permite la compra de parcelas para construir casas a medida o puertos deportivos.

Estos matices, así como la legalidad de una propiedad que un inversor desea adquirir, pueden ser confirmados por un agente inmobiliario autorizado.

La aportación al fondo estatal es una opción de inversión no reembolsable. La inversión mínima es:

• $200,000 en Dominica;

• $230,000 en Antigua y Barbuda;

• $235,000 en Granada;

• $240,000 en Santa Lucía;

• $250,000 en San Cristóbal y Nieves.

La aportación a una institución de educación superior es una opción no reembolsable disponible en Antigua y Barbuda. Solo las familias de seis o más miembros pueden elegir esta opción. La inversión mínima es de $260,000.

La compra de bonos gubernamentales es una opción de inversión reembolsable disponible en Santa Lucía. La inversión mínima es de $300,000.

La inversión empresarial es una opción reembolsable disponible en Santa Lucía y Antigua y Barbuda. La inversión mínima comienza en $1,000,000 en Santa Lucía y $400,000 en Antigua y Barbuda. En Santa Lucía, los solicitantes también pueden invertir al menos $250,000 en proyectos de infraestructura autorizados por el gobierno.

1. Los inversores pueden obtener la ciudadanía mediante la compra de propiedades en cinco países caribeños: Antigua y Barbuda, Granada, Dominica, San Cristóbal y Nieves, y Santa Lucía. La cantidad de inversión mínima es de $200.000.

2. El inmueble de inversión es un activo líquido que puede revenderse en 3—7 años para recuperar la inversión.

3. Otras opciones de inversión en el Caribe incluyen aportaciones a un fondo estatal, donaciones a una institución de educación superior en Antigua y Barbuda, la compra de bonos gubernamentales en Santa Lucía. Las inversiones empresariales están disponibles en Santa Lucía y Antigua y Barbuda. La cantidad de inversión mínima es de $200.000.

4. El pasaporte caribeño permite a los inversores viajar sin visado a más de 140 países, optimizar impuestos, obtener visados a largo plazo para EE. UU., y abrir cuentas en bancos europeos y de la Commonwealth con mayor facilidad.

5. Los familiares de un inversor son elegibles para los pasaportes caribeños. Un cónyuge, hijos menores y los padres del inversor pueden ser incluidos en la solicitud en los cinco países.