¿Por qué los extranjeros deberían iniciar un negocio en Estados Unidos?

Tanto los residentes como los no residentes de EE. UU. pueden registrar una empresa en el país. El proceso dura entre 5 y 6 semanas e incluye la presentación de una solicitud en línea, la obtención de un número de identificación fiscal y la apertura de una cuenta bancaria de empresa.

No es necesario trasladarse a EE. UU. para registrar una empresa. Si el negocio no está ligado a una ubicación específica, el emprendedor puede dirigirlo de forma remota. Sin embargo, los emprendedores remotos pueden querer trasladarse por otros beneficios, por ejemplo, el networking.

Trasladarse a EE. UU. permite a los emprendedores introducirse en el entorno empresarial y conocer a posibles inversores en persona. Una forma de trasladarse a EE. UU. es con un visado EB-5 para emprendedores e inversores.

El primer paso para establecer una empresa es elegir una forma de gestión. Puede ser empresa unipersonal, sociedad colectiva, LLC o C-corporate.

Empresa unipersonal es la forma más sencilla de estructura empresarial — el negocio es propiedad de una persona con responsabilidad financiera que puede contratar a otros para ayudar a dirigir la empresa.

Sociedad colectiva es operada por dos o más personas con responsabilidad financiera que arriesgan su dinero o activos. Hay dos tipos de sociedades colectivas: general y limitada.

Sociedad de responsabilidad limitada (LLC) es adecuada para pequeñas empresas como productos básicos o venta de servicios en línea con uno o pocos propietarios. Dicha empresa tiene una tributación y gestión documental simplificadas.

C-corporate es una empresa con un consejo de accionistas y una estructura de gestión compleja. Esta forma de gestión permite a los fundadores vender acciones de la empresa en el mercado de valores, lo que facilita a los inversores la contribución a una corporación. Por eso la mayoría de las startups eligen esta forma de gestión.

Después de elegir la forma de gestión y el estado en el que operar, un emprendedor puede registrar una empresa en línea en el sitio web del estado.

La lista de documentos depende de la forma jurídica de la empresa: LLC o Corporación. La LLC tiene requisitos menos estrictos, ya que tiene una estructura de tributación y gestión más sencilla. Sin embargo, la lista de documentos es similar para ambas formas jurídicas.

• Certificado de Constitución o Artículos de Constitución. Estos documentos demuestran que una empresa está registrada oficialmente, mostrando el tipo de constitución de la empresa, el nombre y el capital social autorizado.

• Estatutos o Acuerdo de Funcionamiento. Los propietarios de la empresa deben acordar de antemano la frecuencia de las reuniones y cómo seleccionan a los candidatos para los puestos de dirección. Todo ello se documenta en los estatutos.

• Certificado de Acciones para cada accionista indica la participación de esa persona en la empresa.

• Formulario IRS SS4 para obtener un Número de Identificación de Empleador (EIN). El EIN es necesario para rastrear las obligaciones fiscales de una empresa.

• Licencias y permisos específicos para operar legalmente.

• Copias de pasaporte de todos los cofundadores.

Las empresas en EE. UU. deben pagar dos tipos de impuestos: federales y estatales. Ambos se suman para formar el impuesto de sociedades total.

El impuesto federal no depende del estado y se fija en el 21% del beneficio neto de la empresa.

Los impuestos estatales varían de un estado a otro. Por ejemplo, el impuesto de sociedades en California es del 8,8%, y en Florida es del 5,5%. También hay estados como Texas que no tienen impuesto de sociedades. Las tasas impositivas bajas suelen afectar la calidad de los programas sociales, la educación y la atención médica.

Normalmente, cuando un emprendedor retira dinero de un negocio, también tendrá que pagar el impuesto sobre la renta. Este formato de tributación se denomina C-corp. Sin embargo, si la empresa tiene menos de 100 empleados, la empresa puede convertirse al formato S-corp para evitar la doble tributación.

Menor impuesto de sociedades. Estados Unidos tiene una tasa de impuesto de sociedades más baja que muchos otros países, y las autoridades trabajan constantemente en reformas fiscales. La última reforma en 2017 estableció un impuesto fijo del 21% en lugar de un impuesto progresivo de hasta el 35%.

Acceso más fácil al capital. EE. UU. cuenta con mercados financieros diversos, incluyendo capital riesgo, capital privado y financiación pública a través de los mercados de valores. Debido al ecosistema de inversión bien establecido, a los emprendedores a menudo les resulta más fácil recaudar dinero y asegurar inversiones en EE. UU.

Leyes y regulaciones favorables a los negocios. EE. UU. tiene derechos de propiedad y mecanismos de cumplimiento de contratos bien definidos. Además, los emprendedores pueden elegir la forma de gestión y el estado más adecuados para operar.

Reputación internacional. Los inversores y socios potenciales confían en las empresas registradas en EE. UU. También reciben y envían pagos al extranjero rápidamente y no tienen problemas logísticos.

Gestionar un negocio en Estados Unidos requiere comprender las particularidades del entorno. Por ejemplo, los propietarios de servicios en línea pueden sorprenderse al saber que las empresas estadounidenses a menudo gastan mucho más en el primer contacto con un cliente de lo que la propia venta generará.

Para comprender las sutilezas de hacer negocios en EE. UU., las pequeñas empresas y startups pueden aprovechar los fondos de capital riesgo, las incubadoras de empresas y las aceleradoras. Estas son organizaciones que ayudan a las empresas a crecer de diferentes maneras.

Los fondos de capital riesgo invierten en empresas prometedoras. Obtienen una participación en la empresa y reclaman un beneficio si esta crece. Con estos fondos suele ser más fácil negociar, ya que representan a un grupo de inversores en lugar de a un único inversor.

Las incubadoras comparten sus conocimientos y experiencia sobre cómo hacer negocios en Estados Unidos. No suelen proporcionar financiación, pero ofrecen a las empresas una plataforma para establecer contactos a través de la mentoría.

Las aceleradoras ayudan a las empresas y startups a escalar. Al igual que las incubadoras de empresas, las aceleradoras ayudan con el conocimiento, pero se centran en startups maduras y las ayudan a escalar aún más después de su primer éxito.

Una forma de trasladarse a EE. UU. para establecer una empresa es a través de un visado EB‑5 para emprendedores e inversores. El visado permite al solicitante y a los miembros de su familia trasladarse a EE. UU. y obtener una Green Card en un plazo de 5 años.

Para obtener un visado EB-5, un emprendedor debe invertir en un negocio de forma independiente o a través de Centros Regionales. La mayoría de los inversores prefieren los Centros Regionales porque se encargan de todo — solo hay que poner el dinero sobre la mesa. La inversión puede recuperarse después de 5-7 años si el negocio prospera.

La cantidad mínima de inversión es de $870,000, que incluye la inversión real y la tasa administrativa. Las solicitudes de visados EB-5 se revisan durante aproximadamente 3-4 años. Si se aprueba, el inversor y su familia obtienen Green Cards con la perspectiva de obtener la ciudadanía.

1. Procedimiento de registro de empresa sencillo: los emprendedores pueden solicitar en línea sin necesidad de venir a EE. UU. para esperar una decisión. Tampoco es necesario alquilar una oficina para obtener una dirección comercial, ya que el alquiler de un buzón legal es adecuado para la documentación.

2. La cuenta de empresa se puede registrar en un banco fiable. Muchos bancos se encuentran en la categoría de «demasiado grandes para quebrar», respaldados por el gobierno en caso de crisis.

3. Las startups tienen muchas oportunidades de financiación y asistencia de fondos de capital riesgo y aceleradoras. Entrar en un entorno empresarial es una de las razones por las que los emprendedores se trasladan a EE. UU. para iniciar un negocio.

4. Bajas tasas impositivas sobre la renta corporativa: 21% de impuesto federal más impuesto estatal, que varía en diferentes estados. Algunos estados no tienen impuesto estatal.

5. El gran mercado interno de EE. UU. permite a una empresa escalar trabajando con clientes locales y luego internacionalizarse.